A lo largo de nuestra historia, los pueblos y comunidades que constituimos la Coor­dinadora Regional de Autoridades Comu­nitarias - Policía Comunitaria (CRAC-PC), imaginamos un mundo otro, un mundo que reconociera y aceptara la persistencia de los pueblos y naciones mesoamericanas, que reconociera no solo nuestra manera de ver, sentir y expresar nuestro mundo, sino tam­bién nuestra manera de organizar la vida. Imaginamos un país que reconociera a las diversas expresiones culturales, más allá del color de su piel, de los rostros, del lengua­je, de su vestimenta, de su cuerpo y de su territorio.

 

Largo tiempo entendimos que solo tejien­do, remendando lo nuestro, cultivando tie­rra y vida, sería posible ese otro mundo. Así, Imaginamos y definimos una inmensa comunidad de comunidades organizadas políticamente, bajo los principios de la jus­ticia, la fraternidad, la solidaridad y la reci­procidad. Imaginamos comunidades libres, autóno­mas e igualitarias.

 

Imaginamos lo inimaginable, lo odioso, lo guajiro, lo imposible, lo arcaico, lo sublime, lo absurdo, lo inenarrable, la vida misma, lo doloroso, lo indecible; lo que ellos, nuestros ancestros, los que fundaron la comunidad, cultivaron y no les fue posible cosechar. Y pese a todas las dificultades, hoy pode­mos expresar, que esa utopía añeja (perver­sa para unos, sagrada para otros), recorre como un fantasma caminos insospechados, extendiéndose a los lugares más recónditos del país.

 

De manera que hoy, las naciones Me´Phaa, Ñu Savi, náhuatl, Ñomnda, Afromexicanos y Mestizos, damos inicio a una nueva etapa de resistencia con EL PERIÓDICO “COMU­NITARI@”. Periódico El Comunitario CRAC-PC.